paella al estilo GRACIELA

Y espera con mucha guasa
Mi amiga Graciela,
Encendiendo con las brasas,
Su receta de paella,
Pues bien querida amiga,
Con buen tacto y muy buen tino,
En las artes culinarias,
Y en arroces y marisco,
Es base fundamental,
Hay que tener bien presente,
Disposición al evento,
El buen humor, principal ingrediente,
En la paellera llana,
O sarten plana en su defecto,
Con aceite de oliva,
Se fríen ajos, cebolla picada
Y un poquito de pimiento,
Al punto de estar sofrito,
Se añade el pollo troceado,
Si es de corral mas rico,
O conejo, bien picado,
U otra carne, al gusto
Después que la cazuela
Parezca, que te hable y te diga,,
plof, plof, polf,
le añades el marisco,
sea gamba, o camaron
almejas o conchas negras,
mas bien dicho mejillón,
calamar o cefalopodo,
da igual su identificación,
previamente, prelavado,
pero, nunca con jabon,
porque luego hace burbujas,
y no se prestan en cuestion,
cuando este todo sofrito,
se le añade el arroz,
en proporción, equilibrada
un puñado a cada uno,
y otro para entre todos,
según los comensales,
si sois cuatro ,hechas cinco
si sois veinte , veintidós,
la sal al gusto tuyo,
si quedas corta mejor,
asi evitaras
que te suba la tensión,
todo esto a fuego lento,
un poco de colorante,
o un poquito de palillo,
que se remueva todo,
poquito a poquillo.
Y el agua, se le añade
Con cada parte de arroz,

de agua dos,
O si quieres que sea mas sabrosa,
Le añades una cuzqueña,
Media botella de cerveza,
Veras que sale buena,
La otra media que sobra,
sin duda para la cocinera,
tomandola, poco a poco,
mientras vigilas la leña,
a esperar que se haga el arroz,
todo listo en la mesa,
cuando se cueza en cuestion,
unos minutos de espera,
y antes de la bendición,
tres hurras por la cocinera,
pues hay, tienes querida hermana,
espero que tu receta,
de la paella española,
también sea caruhasqueña.
Veras como quedas como reina,
Como Graciela primera,Reina de sus recetas

JUGUEMOS UN RATO

En el tablero, como en la vida,
Todos los días una partida,
Hay que estar cierto, donde se pisa,
Blancos o negros son los mosaicos,
Corres el riesgo si te equivocas,
Hay que ser cauto al mover la ficha,
Ocho peones van al ataque
Frente a otros ocho que en su amenaza,
Mandan prudencia o habilidad,
Y si te comen, pues perderas
Aunque esta, claro hay que arriesgar,
Unos atacan, otros protegen,
Teniendo en cuenta que la batalla,
Es fundamento, de la campaña,
Manda el rey a sus caballos
Formando eles y saltando,
A sus alfiles de medio lado,
Y a sus torres, amenazando
Siempre para delante, o para detrás,
Izquierda, o derecha y sin saltar,
Y los peones, en su camino,
Siempre adelante, es su destino,
Luego la dama con sus paseos,
Se mueve libre, es su deseo,
Y el buen rey, de uno en uno,
Manda en el damero, lo mas oportuno,
Nunca al enemigo subestimando,
Las fuerzas son pares, dualizando,
Manda a un peon, de emisario,
A ver la reacción, del adversario
Si el enemigo, manda al caballo,
Amenaza, con afil, y abrele paso
Y si te amenaza con otro potro,
Haces enrroque, largo o corto,
Pero una cosa clara, debes tener,
Saca las piezas, amenaza y protege,
No subestimes al adversario,
Pero cree en tu equipo, con mucha fe,
Marca distancias, y arrímate a la vez,
En la partida, como en la vida,
Inteligencia has de tener,
Agudiza el genio y se sensato,
Da buena muerte, a tu adversario,
Pues de seguro que el, lo es,
Entre caballeros debes saber,
Que las normas de caballeria,
Son de honores, en esta vida,
Si en el espejo tu te plantas,
Juegues con negras, o con blancas,
La fuerza tuya, o del enemigo,
Es , la misma a uno y otro lado,
O marcas tablas o sigues jugando,
Porque, en el espejo, tu adversario
Mucho, se perece a ti ,si lo miras
el que te esta mirando,
observa, del otro lado el reflejo,
veras como te sigue mirando,
y si flaqueas en tu combate,
te mueve ficha y te da jaque,
usa muy bien todas tus fichas
y asi podras, ganar la partida,

UN LINDO SAPITO

Soy un sapo verde
Que por tu beso se pierde,
Por ti amada princesa
Yo pierdo la cabeza,
Solo pasan por mis sesos
Que me dieras tu un beso
Y en príncipe me convirtieras,
Pero no tengo esa suerte,
Aun me limpio mis mofletes,
A ver si cae algún dia,
Y te llevo a la vicaria,
Y las perdices comemos,
Antes que acabe este cuento,
Un buen dia por la mañana
La princesa despistada,
Mirándose en el espejo,
Observo en el lavabo
¡un sapo verde, que es esto¡
Y me tiro a la calle,
Por la ventana del baño,
Con tal suerte la mia,
Que en los labios caiga
De aquella bonita vecina,
Y en su susto que se dio,
Hizo de su labios un gesto,
Y en principe me convirtió,
Y como hize juramento,
De casarme con doncella,
Que me besara de sapo,
Me case con esta bella,
ella que sabia el cuento,
me arropo en su aposento,
ahora feliz y contento,
compartimos alegrías,
y la vecina de arriba
nos mira con mala vista
lo que un dia desprecio,
hoy admira con envidia,
asi es la vida, princesa,
buscate otro batracio,
que te croe muñeca,
si la envidia te corroe,

el tren paso por tu puerta.