martes, 3 de mayo de 2011

No se me ocurre mayor ataque ,
que cobijarme entre tus brazos como trinchera.
pues es tu presencia, queira, o no quiera,
y es el amor o como se llame,
lo que invade la mente , de un despistado ,
que por invocar a cupido desesperado ,
fue con la belleza de la amada atado ,
o saber el nombre que reciba.
pues de nuevo es el amor estriba ,
que aquel que ama, dicen que espera,
haber dado significado a su vida.